¡Ah, las comidas imposibles de Otilio y los pobres clientes-víctima de tan singular pareja de hacedores de estropicios! Este número sí que tengo el placer de tenerlo en mi colección. Con las historietas de Pepe Gotera y Otilio, Mortadelo y Filemón, y sobre todo con las del Botones Sacarino, un servidor reía un montón (no sólo sonreía: reía a carcajadas y bien alto).
Coincido contigo en lo de Sacarino, Joan. Sin duda era el personaje de Ibáñez cuyas situaciones delirantes más me divertían y aún ahora releyéndolo no puedo evitar soltar unas risas.
Gracias por tu fidelidad al blog, pronto más cositas para deleite del personal. ¡Buen fin de semana!
El burgomaestres que ahora escribe con quien más se desternillaba era con Rompetechos. En fin, disculpen lo autobiográfico, y ¡qué gran blog está haciendo, amigo Gordito Relleno!
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¡Ah, las comidas imposibles de Otilio y los pobres clientes-víctima de tan singular pareja de hacedores de estropicios! Este número sí que tengo el placer de tenerlo en mi colección. Con las historietas de Pepe Gotera y Otilio, Mortadelo y Filemón, y sobre todo con las del Botones Sacarino, un servidor reía un montón (no sólo sonreía: reía a carcajadas y bien alto).
Coincido contigo en lo de Sacarino, Joan. Sin duda era el personaje de Ibáñez cuyas situaciones delirantes más me divertían y aún ahora releyéndolo no puedo evitar soltar unas risas.
Gracias por tu fidelidad al blog, pronto más cositas para deleite del personal. ¡Buen fin de semana!
El burgomaestres que ahora escribe con quien más se desternillaba era con Rompetechos. En fin, disculpen lo autobiográfico, y ¡qué gran blog está haciendo, amigo Gordito Relleno!
Bocadillitos de ballena porque el médico le ha recomendado pescado azul...
Ah
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